Y llegó el momento tan esperado del viaje a Asturias. Dos días repletos de actividades y convivencia en la comunidad vecina. Fue el jueves 16 y viernes 17 de mayo.
En primer lugar fuimos al MUJA (Museo del Jurásico de Asturias) en Colunga. Descubrimos un maravilloso lugar donde aprendimos cómo eran los dinosaurios que vivieron en estas tierras. Vimos huellas, huesos y huevos fosilizados. Desde los más pequeños a los más gigantescos.
Tanto animal prehistórico, nos provocó un hambre extraordinario. Aprovechamos las campas e instalaciones del museo para comer nuestro picnic para reponer fuerzas.
Después nos dirigimos a Nava, al Museo de la Sidra de Asturias. Aprendimos cómo se elabora esa bebida, desde la recolección de la manzana hasta el embotellado.
Donde más nos divertimos fue tocando la gaita y el tambor, jugando a la rana y escanciando sidra, como auténticos profesionales.
¡¡Puntería!!
Incluso algunos tomamos un culín de sidra. La ocasión lo merecía.
Como podéis ver, arte no nos falta.
Un rincón de los apartamentos
Un lugar muy bonito y agradable
Al atardecer nos dirigimos a nuestro alojamiento: Los Jardines de Llanes. Unos apartamentos turísticos que nos encantaron. Nos instalamos en nuestras habitaciones y dejamos nuestro equipaje. Descansamos un rato, pero... pronto nos atacó el hambre.
Y resulta que nuestra hambre fue vencida por unas pizzas riquísimas que cenamos en una pizzería italiana del centro de Llanes. Quedamos muy, muy satisfechos.
¡¡Qué ricas estaban las pizzas!!
A la mañana siguiente y tras un merecido descanso en los apartamentos, desayunamos en un hotel cercano. Para alguna persona era la primera vez que hacía un viaje de estas características. No hace falta decir que lo pasó genial.
Una visita por Llanes, por el puerto y por sus tiendas y calles.
Para llevarnos un excelente sabor de boca de Asturias, comimos en un restaurante, en buena compañía.
¡¡Qué rico todo!!
Volvimos a Torrelavega muy contentos. Lo pasamos muy bien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario